Este curso hemos empezado a trabajar el proyecto ADI-ADIAN en nuestro Centro. Este programa del Gobierno Vasco pretende promover una vivencia educativa que permita ver y sentir la injusticia del sufrimiento real que produce la violencia para aprender de ello, que busca desarrollar en el alumnado la capacidad de empatía con quienes sufren y aprender a convivir mejor sobre la base del respeto y a trasladar este aprendizaje a la vida cotidiana.
Durante cinco sesiones nuestro alumnado de 4ºESO está trabajando la empatía, la convivencia, la dignidad humana, los derechos humanos y el sentido crítico frente a la injusticia.
Este viernes pasado hemos empezado con la fase de los “testimonios” y hemos contado con Mikel, hermano de Jon Paredes “Txiki”, último fusilado por el régimen franquista poco antes de la muerte del dictador. Nos ha transmitido su mensaje vital de convivencia y frente al odio y su esfuerzo para rehacer su vida de forma constructiva.
Mikel es extremeño y con 8 años dejo el campo y vino a Zarautz. Su hermano Jon y el resto de la familia vinieron a vivir al País Vasco un año más tarde. Eran unos años convulsos, en los que empezaban a crearse muchos movimientos sociales contra los abusos del régimen. Los dos hermanos, por su espíritu solidario, pronto ingresaron en diferentes movimientos fundamentalmente obreros. Jon acaba incorporándose a ETA y después de poco tiempo de militancia en la banda, es detenido en Barcelona. Acusado de asesinato, es torturado en dependencias policiales hasta que se declara culpable. Se pide para él pena de muerte en juicio sumarísimo. Resulta condenado a muerte y es fusilado el 27 de septiembre del 75.
Ahora Mikel, después de años trabajando con otras víctimas, forma parte de este programa del Gobierno Vasco y va contando su experiencia a jóvenes del País Vasco. Cuenta cómo ha superado su odio, como el sufrimiento es igual para todas las víctimas sean del “bando” que sean e igual de injusto. Él lo tiene claro; “nada hay más importante que la vida de los seres humanos”.
Mikel nos ha dado una lección de historia fantástica y una lección de humanidad de un valor incalculabe. El próximo martes contaremos con Alex Moreno, otro testimonio que seguro que ayuda a los alumnos a deslegitimar el uso del terrorismo y la violencia, y transmite un mensaje a favor de la convivencia y en contra del odio.