El alumnado de 4ºA de ESO ha participado en una enriquecedora actividad organizada por la Fundación BBK y el Centro de Día de Muskiz en torno al proyecto “Invisible Soledad”, una iniciativa que busca visibilizar y reflexionar sobre la soledad no deseada en nuestra sociedad.
El encuentro, celebrado en el Meatzari Aretoa de Muskiz, partió de la escultura “Invisible Soledad” del artista Rubén Orozco Loza, que representa a Mercedes, una mujer mayor que simboliza a tantas personas que viven en situación de aislamiento. A partir de su historia, el alumnado compartió en grupo sus propias percepciones sobre lo que significa sentirse solo y debatió sobre las causas de la soledad en diferentes etapas de la vida.
Durante la dinámica, surgieron reflexiones profundas sobre cómo la tecnología, pese a acercarnos digitalmente, puede alejarnos emocionalmente. Cada vez más jóvenes entre 17 y 29 años reconocen sentirse solos, lo que convierte este fenómeno en uno de los grandes retos sociales del siglo XXI.
El proyecto “Invisible Soledad” busca precisamente eso: hacer visible lo invisible, generar empatía y promover redes de apoyo reales que ayuden a combatir la soledad desde la educación y la convivencia.
Una experiencia que ha invitado a nuestros alumnos y alumnas a mirar con otros ojos la realidad que les rodea, recordando que, más allá de las pantallas, la verdadera conexión está en las personas.









